domingo, 16 de junio de 2013

Killer Elite


Esta es una película explosiva, de esas que te fijan al asiento sin dejarte ni respirar, mientras transcurren los acontecimientos en la pantalla.

Nos presenta a Danny (Jason Statham) un asesino a sueldo de alguna agencia secreta británica, que ya se ha dado de baja y se ha retirado a su hogar natal en Australia, donde se reencuentra con un amor de infancia, Anne (Yvonne Strahovski), una mujer dedicada a su rancho, de quien vuelve a enamorarse, al punto de soñar con una vida tranquila junto a ella.

Pero como eso no nos iba a dar nada de acción, su compañero de armas y mentor, Hunter (Robert De Niro) cae en manos de un clan árabe en Omán, para el que estaba haciendo un trabajo que no concluyó bien, y contactan a Danny para que se encargue de terminarlo o matarán a su amigo.

Danny vuelve a Inglaterra, donde reúne a su viejo equipo de trabajo, para enfrentar esta nueva misión:  matar a tres ex-agentes secretos británicos, que mataron a tres hijos de un jeque omaní, que busca justicia.  Las muertes deben parecer accidentales, sin embargo, levantan las sospechas de una sociedad secreta, que agrupa a ex-agentes de inteligencia y les protegen, por lo que envían a su brazo activo, otro asesino más de nombre Spike (Clive Owen), quen le da caza a Danny, a quien aunque no logra detener (termina su misión), si elimina a sus compañeros de equipo. 

Al terminar el trabajo, sueltan a su amigo Hunter y él regresa al rancho de Anne, y es entonces que recibe una amenaza directa contra ella, ya que al parecer hay un cuarto hombre involucrado en los asesinatos de los hijos del jeque, que sigue vivo.  Ante la amenaza a la mujer que ama, huye con ella a París, para ponerla a salvo al lado de Hunter, mientras termina la misión de una vez por todas.

La acción transcurre en un frenesí de carreras de autos, enfrentamientos a tiros, combates cuerpo a cuerpo, con las manos o con lo que sea que a ellas llegue.  Las escenas están muy bien hilvanadas y coreografiadas.  La acción en la calle es impecable y el ambiente británico, con esos acentos fuertes entre ingleses y australianos, sazonan a la perfección la trama.

Las actuaciones muy buenas, Robert De Niro impecable y me sorprendió mucho, la de Yvonne Strahovski, que interpreta a una mujer de trabajo pero frágil e inocente, tan diferente a la Cersei de Juego de Tronos, que causa un ligero corto circuito en el cerebro.

Disfruté mucho la película.  Acción de la buena.

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