sábado, 8 de junio de 2013

Les saveurs du Palais


Esta película francesa es una delicia, en el más amplio sentido de la palabra.

Nos cuenta la historia de Hortense Laborie (Catherine Frot), quien es contratada como cocinera privada del Presidente Francois Miterrand (Nicolas Bauvois), en el Palacio del Eliseo, desde una Base Científica en la Antártida, donde se refugió al terminar su trabajo para el presidente.

La película se basa en la historia real de Daniele Delpeuch, quien efectivamente fue cocinera de Miterrand entre 1988 y 1990.

Hortense se muestra como una mujer de carácter fuerte, indispensable para meterse de cabeza en una cocina donde decenas de hombres consideran muy despectivamente a las mujeres, pero sobre todo una mujer fiel a sus principios.  Cree en la cocina como un arte, en el espectacular arte del gusto, y para ello, se requiere de productos de primera calidad.

De hecho, entre platillo y platillo (y muchas babas de quien esto escribe) la acción se desarrolla en su defensa por brindarle al presidente, platillos preparados con esmero, gran habilidad y sobre todo una pasión sin igual, lo cual la enfrenta a todos, a contadores y a cocineros, a encargados de protocolo y a los médicos del presidente, que insisten en que controle la dieta que se le ofrece.

Su salida de esa cocina, se dio como un acto de sinceridad y consecuencia con ella misma, porque era imposible cocinar como se debe, con las limitaciones que le estaban imponiendo, pero fue tan difícil dejar ese trabajo, que de inmediato aceptó el puesto de chef en una isla desierta en la Antártida, cocinando para científicos y técnicos, literalmente con las uñas, trabajo que desempeñó por un año, para trasladarse luego a Nueva Zelanda, a desarrollar un proyecto de producción de trufas.

Esta película me dejó un hoy enorme en el estómago.  La pasión por la cocina de Hortense y la delicia de los platillos que se presentan en pantalla, lo dejan a uno salivando.  Disfruté la película desde el inicio hasta el final.  Excelente, maravillosa, bien actuada, bien tratados los conflictos interpersonales y sobre todo la relación de Hortense con el presidente.

Sigo salivando.

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