domingo, 16 de febrero de 2014

¿Qué le dijiste a Dios?


¡Que terrible! En tantos años de ver cine, he visto películas malas... y ésta.

Debe ser que me hace falta algún chip especial para apreciar este tipo de trabajos, porque al parecer la película fue taquillera en México, pero yo realmente no le encontré nada, nada, nada que valga la pena rescatar.

La historia, recargada de clichés, de estereotipos, de conflictos de clase endulzados con Splenda, es por demás insulsa.  La historia nos presenta a dos empleadas domésticas, Lupita y Martina (¿?), que trabajan para una bruja rica de nombre Marcela, quien tiene un romance con Santiago, el esposo de Marifer, su mejor amiga, a espaldas de su esposo Héctor.  El desarrollo de la historia se da cuando la bruja le niega a sus "chachas" el permiso para ir de fin de semana a su pueblo, donde una prima se casa.  Las trabajadoras deciden tomar venganza y se van sin permiso, llevándose de paso unas cuantas bolsas con ropa de diseñador de su "patrona".  El desenlace se da cuando Marcela y Marifer van en busca de la ropa de la primera y en medio de ese "drama" se descubre su relación prohibida y en medio segundo todo concluye como si se les acabara la cinta y tuvieran que terminar o se queda sin final la película.

Ok, ahora imagínense toda esa historia, llena de canciones de Juan Gabriel, con "arreglos" modernos, de tipo musical, con coreografías mal coordinadas y que nada añaden a la historia y con voces desafinadas, en un conjunto que parece una versión de Grease dirigida por Pancho Villa.

Terrible.  La vi por pura disciplina, pero ni siquiera las situaciones supuestamente cómicas llegan a serlo.

Espero que se ahorren el tiempo de verla.


No hay comentarios:

Publicar un comentario